Los graffitis del castillo de Kelburn en Escocia se han convertido en una atracción turística única y colorida. Situado en la ciudad de Largs, en el condado de North Ayrshire, este castillo del siglo XIII ha sido adornado con impresionantes murales pintados ensorcando visitantes de todo el mundo.
La historia detrás de estos graffitis es fascinante. En 2007, los condes de Glasgow, propietarios del castillo, permitieron que un grupo de artistas urbanizara la fachada del edificio con coloridos murales. La idea surgió como una forma de atraer visitantes y recaudar fondos para la restauración del castillo.
Desde entonces, los graffitis han estado en constante evolución, con nuevos diseños y obras maestras agregadas cada año por artistas internacionales y locales. Los murales representan una mezcla de estilos y temas, desde paisajes abstractos hasta figuras surrealistas y personajes históricos.
A pes, la controversia ha rodeado estos graffitis, ya que algunos puristas del arte consideran que pintar un
