Las inscripciones de Orjón, grabadas en Mongolia en el siglo VIII, son uno de los tesoros más antiguos y valiosos de la historia de la lengua túrquica. Estas inscripciones, que datan de alrededor del año 732, fueron descubiertas en la región de Orjón en Mongolia en el año 2004 y han sido objeto de intensos estudios e investigaciones desde entonces.
Las inscripciones de Orjón constan de un total de 62 estelas de piedra, con inscripciones en forma de runas túrquicas que relatan la historia y las hazañas de los pueblos túrquicos de la región. Estas inscripciones son consideradas como las más antiguas conocidas en lengua túrquica, y han proporcionado valiosa información sobre la cultura, la sociedad y la lengua de los túrquicos en el siglo VIII.
Las inscripciones de Orjón han sido de gran importancia para los estudiosos de la historia de la lengua túrquica, ya que han permitido rastrear la evolución de esta lengua a lo largo de los siglos. Además, estas inscripciones han arrojado luz sobre la interacción entre los túrquicos y otros pueblos de Asia Central en la antigüedad, mostrando la influencia de diversas culturas en la región.
Uno de los aspectos más fascinantes de las inscripciones de Orjón es su forma de escritura, basada en un sistema de runas túrquicas que ha sido difícil de descifrar para los estudiosos. Sin embargo, a través de meticulosos análisis y comparaciones con otros textos y lenguajes, se ha logrado descifrar gran parte de las inscripciones, lo que ha permitido entender su significado y su importancia histórica.
Las inscripciones de Orjón son un testimonio invaluable de la rica historia de los pueblos túrquicos en Asia Central, y han sido reconocidas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Su estudio y preservación son fundamentales para comprender la evolución de la lengua y la cultura túrquica, así como para enriquecer nuestro conocimiento de la historia de esta fascinante región del mundo.